Cómo transitar del propósito a la sostenibilidad de tu empresa.
Muchas cosas salen bien en la vida “de chiripa” como decimos en algunas regiones y culturas:
Chiripa, nombre femenino.
En el juego de billar, suerte favorable ganada por casualidad.
Coloquial: Casualidad favorable, "me encuentras de chiripa, porque ya estaba por salir".
Claro que la suerte siempre ayuda y la intuición también. Pero para crear, consolidar y hacer sostenible un negocio a largo plazo se necesita más. Ese “más” es el propósito.
Muchas empresas han visto su fin en los últimos años en que los mercados se tornaron altamente competitivos, plenos de innovaciones y sumamente disruptivos por la pandemia o los cambios de hábitos de los consumidores. Algunas de ellas no tenían un propósito poderoso. La suerte, intuición y capacidad de sus líderes no fue suficiente para sacarlas adelante en esas tormentas.
El poder de un propósito reside en varios aspectos:
Representa la razón de existir de una empresa. Esto no se refiere a lo que hace la compañía sino a lo que la inspira para seguir en el rumbo correcto en cualquier condición de los mercados. Le permite sortear tormentas, enfrentar corrientes y mantener el rumbo hacia un punto en el horizonte en cualquier condición y circunstancia.
Visualizando a la empresa como un ecosistema armónico, el propósito constituye el factor de cohesión que aglutina las capacidades y multiplica los resultados de los esfuerzos colectivos en la empresa. Inspira a los directores, contagia a los colaboradores y conquista a los clientes.
Finalmente el propósito constituye el sustento de la sostenibilidad de la empresa. Alinear correctamente los pilares que generan el valor y tomar en cuenta a todos los stakeholders con los que la empresa tiene relación, se convierte en la estrategia más poderosa para construir futuro. Las estrategias y acciones que el propósito inspira van más allá de los tradicionales accionistas, empleados y clientes. Hoy en día van incorporando también a las familias de sus empleados, a proveedores, la cadena de distribución, las comunidades que la empresa toca en sus operaciones y evidentemente al medio ambiente.
Definir un propósito no es una moda ni una ocurrencia. Un propósito poderoso es capaz de transmitir el legado del fundador a través de generaciones y mantener la sostenibilidad de una empresa a lo largo del tiempo.
Un propósito poderoso es la guía para mantener el rumbo en todo momento y no perder la dirección en épocas difíciles.
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Nuestras herramientas han ayudado a diferentes empresarios y directores a enfrentar mejor los retos con muy buenos resultados, como la empresa que creció 55% sus ventas en el año de la pandemia.