Si cuando creías tener todas las respuestas estás encontrando que te cambiaron todas las preguntas, no te extrañes. Se trata de un proceso que se ha vuelto natural en los mercados y se basa en la capacidad de disrupción de otras empresas o marcas. Mientras tú has estado operando tu negocio otros han estado buscando el camino para robarte el mercado y cuando algunos de ellos lo van consiguiendo es cuando empiezas a ver a tu negocio como si se quisiera mandar solo. Deja de comportarse como siempre, empieza a llenarte de sorpresas casi siempre desagradables y no reacciona a los estímulos de siempre.
Es momento de dejar de ver el mercado a través de tus ojos y empezar a verlo con los de tus consumidores para entender qué es lo que están recibiendo de tus competidores que está ocasionando que te abandonen o se cuestionen la conveniencia de seguir contigo.
Seguramente dolerá, pero cuando identificas claramente tu dolor es cuando puedes empezar a poner remedio.
Si parece que tu negocio hoy en día ni pitcha, ni cacha ni te deja batear, es hora de que platiquemos para entender las nuevas preguntas y plantear las respuestas.